Un viaje por el espacio
La fotografía no sólo sirve para reflejar la realidad de nuestro mundo, sino que también nos ayuda a ver y comprender nuestro universo. Es así como la astronomía se apoya en gran medida de la fotografía para estudiar el cosmos y sus incógnitas. Pero todos nos hemos preguntado alguna vez en nuestras vidas: ¿cómo funciona la fotografía espacial?, cómo toman aquellas fotos tan magníficas de las estrellas y los planetas. Para aquellos curiosos del universo y la fotografía, les daremos a conocer como funciona y su utilidad para el conocimiento de nuestro espacio exterior.
La astronomía es dependiente de la fotografía para estudiar el espacio y esto no sería posible si no combinaran dos inventos de gran importancia para nuestra sociedad, el telescopio astronómico, creado por Galileo en 1609 y la fotografía, desarrollada por Niépce en 1827.
De este modo, al colocar una placa fotográfica en el plano focal de un telescopio, los astrónomos pueden obtener imágenes exactas de la situación y brillo de los cuerpos celestes, es así como se pueden comparar fotografías de la misma zona del cielo, tomadas en diferentes momentos, detectando de esta forma los movimientos de ciertos cuerpos celestes, como los cometas. Una importante cualidad de la placa fotográfica utilizada en astronomía es su capacidad para captar, mediante exposiciones de larga duración, objetos astronómicos imperceptibles al ojo humano.
En los últimos tiempos se ha mejorado la sensibilidad de la fotografía mediante técnicas que permiten una mayor precisión de la imagen, una de ellas es un proceso conocido como efecto fotoeléctrico, en donde la luz de las estrellas libera electrones en un fotocátodo situado en el plano focal del telescopio, de esta forma los electrones liberados se dirigen hacia una placa fotográfica para formar la imagen.
Pero gracias a ciertas técnicas informáticas se consiguen imágenes más detalladas y exactas, procedentes de fotografías del espacio exterior borrosas y alejadas. Las computadoras digitalizan la información fotográfica y después la reproducen con una definición mayor.
Últimamente se han logrado descubrir nuevos planetas, tales como Santa(2003 EL61), Conejito de pascua(2005FY9) y Xena(2003 UB313) gracias a la fotografía, ya que basta con sacar una foto de la zona a estudiar lo suficientemente espaciadas en el tiempo como para registrar un cambio de posición de una “estrella” respecto a las otras de fondo. Pero al determinar su tamaño el asunto se vuelve más complicado, ya que lo único que se tiene es un debilísimo puntito de luz, en este momento entra a la acción el telescopio de infrarrojo, ya que sabiendo cuál es el brillo a esas longitudes de onda del objeto en cuestión se puede calcular la cantidad de calor que emite. Por otro lado, de la distancia a la que se encuentra se obtiene una buena estimación de su temperatura superficial, combinando ambas observaciones se obtiene el tamaño aproximado para ser catalogado como planeta o no (existen también otras variantes, como la de su composición).
Pero la fotografía no sería tan útil si los telescopios no se desarrollaran también ya que éstos permiten observar los objetos más lejanos y débiles del universo. Actualmente el telescopio más grande del mundo es el Very Large Telescope del European Southern Observatory (VTL) en el desierto de Atacama, Chile, el cual consta de 4 telescopios de 8,2m de diámetro, que si operan juntos, funcionan como si se tratara de en único telescopio de 16,4m de espejo. Pero la carrera por el más grande continúa, la universidad de California junto con el instituto tecnológico de California están diseñando el California Extremely Large Telescope (CELT), un telescopio de 30m de diámetro, y de cerca los siguen los europeos, quienes no se quieren quedar atrás y también tienen su propio telescopio extremadamente grande, con un espejo entre 50 y 100m de diámetro, que se espera que entre en funcionamiento en 2015.
De esta forma la carrera por los telescopios está muy lejos de acabarse, lo cual beneficiará a la fotografía espacial y por ende a las nuevas exploraciones astronómicas de nuestro universo.