Por una mejor educación
Fotografías:
Camila González G.
Texto:
Carolina Castro V.
Más de cinco mil estudiantes se congregaron este jueves 24 de abril para marchar exigiendo no sólo una rebaja en el pasaje escolar, sino una verdadera reforma al sistema educacional chileno. Junto con atacar el lucro desmesurado que logran los empresarios del conocimiento, desean establecer garantías de una educación de calidad, algo que el consejo asesor que se encuentra preparando la nueva Ley General de Educación, está pasando por alto. ¿Qué reforma se logró entonces el año 2006 con el movimiento secundario?
Universitarios de la PUCV, USM, UV y UPLA se unieron a través de diversos cánticos y gritos, animando a los porteños para unirse a su lucha, pues en la educación se gesta el futuro de nuestro país.
Se exige desligar la responsabilidad municipal de distribuir el escaso presupuesto que se les designa para educación. Se exige imponer condiciones coherentes a los sostenedores de colegios (como especialización en área educacional). Se exige mayor representatividad en el consejo de los verdaderos actores de la educación, como son los docentes, alumnos y apoderados, quienes viven el sistema.
Lamentablemente, los incidentes provocados por secundarios que se adhirieron a la marcha, junto con la sobreexposición de éstos en los medios de comunicación, sólo han logrado opacar la fuerza del movimiento universitario. Es así como las verdaderas demandas no han podido hacer eco en la ciudadanía, y el Congreso Nacional, por muy cerca que esté, se hace cada vez más inalcansable. ¿Cuándo dejarán de abanderar políticamente temas que atañen a toda la sociedad? Esto no debiese ser una estrategia electoral más.